El dilema de ahorrar en tiempos de pandemia

Las consecuencias de la crisis generada por la pandemia de la COVID-19 ha golpeado a los sistemas de salud, educación, financieros y el comercio mundial desproporcionalmente y sin precedentes. A las miles de vidas que se ha llevado el virus, se suma el incremento de las desigualdades sociales y económicas.

Las finanzas de muchos hogares fueron 'puestas en jaque' por la falta de ingresos, ya sea por la pérdida del puesto de trabajo, la suspensión laboral, los fuertes gastos en atención médica, o la necesidad de migrar hacia la informalidad, lo que obligó a miles de personas a ajustarse para sobrevivir en medio de la pandemia.

Bajo estas condiciones, expertos en economía admiten que el ahorro es un dilema difícil de resolver para muchos panameños, sobretodo si estas mismas personas únicamente han recibido subsidios del Estado o el vale del programa Panamá Solidario en este largo año pandémico.

"Para más del 20% de las personas sus ingresos no alcanzan ni para pagar cuentas ni la canasta básica. Es más, luego de recibir apoyos como Red de Oportunidades y Ángel Guardián, esa situación persiste" afirmó Javier Stanziola, doctor en economía y científico social del Centro de Investigaciones de Estudios Políticos (CIEPS).

Sabemos por encuestas del Cieps, que solo el 25% de los adultos pueden darse el lujo de decir que ahorrarán algo de su salario. Y según el Banco Mundial, solo la mitad de los adultos tienen cuentas bancarias.

Stanziola señala que al país le hace falta una política de desarrollo de negocios y/o emprendimientos que realmente generen valor, ya que la estimulación de todos los sectores que integran el comercio son los que generarán puestos de trabajo con salarios decentes, y es allí donde el Estado debe jugar un papel protagónico.

Creo que los llamados a que las personas trabajadoras ahorren deben ser matizados. Por supuesto que hay que pensar bien en qué se usará el dinero. Hay que hacer presupuestos en el hogar. Pero hay que combatir la dañina narrativa que al panameño no le gusta ahorrar o que les falta disciplina, destacó

Los gastos hormigas

Los gastos hormiga son aquellos que se realizan de manera cotidiana o con alta frecuencia y que pueden parecer insignificantes para tomarlos en cuenta dentro del presupuesto familiar. Sin embargo, estas pequeñas erogaciones como el refresco que se compra en la máquina expendedora, el café "especial" de las mañanas, un capricho en el supermercado, comer fuera de casa la mayoría de las veces, o la suscripción a varias plataformas de series y películas, se convierten en fugas importantes del capital, que a la larga afecta la condición económica del hogar.

Para evitar estas fugas es indispensable distinguir en el presupuesto lo que son necesidades fijas de las variables y reducir estas segundas a lo mínimo posible.

"Es importante no seguir culpando a las personas trabajadoras cuyos salarios siguen representando una proporción cada vez menor del PIB y recomendarles que ahorren en cosas como gastos hormigas", enfatizó Stanziola.

"Las cuarentenas imponen un fuerte costo a las economías por su extensión generalizada a la mayoría de los sectores. Como consecuencia, la mayoría de los pronósticos de los especialistas esperan que esta crisis económica mundial sea la más grande desde la Gran Depresión de 1929". informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo sobre el impacto del COVID en Panamá.

Respecto a la recuperación económica, la directora del Fondo Monetario Internacional Kristalina Georgieva declaró recientemente que la contracción económica no será tan grave como se había proyectado. Sin embargo, señaló que la recuperación mundial será larga, desigual e incierta, al tiempo que indicó que en los países de bajos ingresos “el golpe es tan profundo que hay un riesgo de que haya una generación perdida”.

En su informe, el organismo internacional aseguró que "transcurrido poco más de un año de la pandemia del COVID-19, la comunidad mundial aún enfrenta tensiones socioeconómicas extremas, mientras crecen las pérdidas humanas y millones siguen desempleados”.

No obstante, uno de los grandes problemas que observa la institución es que “la recuperación será desigual y requerirá esfuerzos multilaterales para salvaguardar los avances logrados antes de la pandemia en la reducción de la desigualdad y el alivio de la pobreza”.

La crisis golpea a los más jóvenes y a los menos calificados

Las consecuencias económicas han amenazado a todos los sectores y estratos sociales. Si bien, la recuperación se logrará a través de los años, esta también será desigual dentro de cada país, ya que los trabajadores jóvenes y los menos calificados seguirán siendo los más afectados.

Como la crisis ha acelerado la digitalización y la automatización en gran parte de la industria mundial, muchos de los puestos laborales perdidos tienen pocas probabilidades de reaparecer; eso exigirá una reasignación de los trabajadores entre sectores, lo cual a menudo castiga con dureza los ingresos de quienes antes tenían un puesto, que ahora no existe o lo realiza una computadora.

La lucha titánica que por más de un año ha librado la comunidad científica para elaborar protocolos de bioseguridad sustentados con evidencia para mitigar la propagación y sobre todo el desarrollo de vacunas contra el SARS-CoV-2 a una velocidad sin precedentes en la historia, es la esperanza de los países para recuperar sus sistemas socioeconómicos y levantar el vuelo hacia un mejor futuro.

**Las estadísticas fueron proporcionadas por el Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel) y el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC)**