El conflicto por la aprobación ambiental de un proyecto que colinda con el área de manglares de David
Puerto Barú
Seis organizaciones ambientalistas solicitan que se declare nulo el estudio de impacto ambiental que fue aprobado para el proyecto de Puerto Barú, que se construirá en David.
Chiriquí/La construcción del proyecto Puerto Barú, una ambiciosa iniciativa portuaria y turística que se desarrollará en el distrito de David, ha desatado una ola de criticas, y un grupo de asociaciones ambientales se oponen a la aprobación del estudio de impacto ambiental, al menos en las condiciones que ha sido planteado hasta ahora.
Este proyecto, que implica una inversión de 250 millones de dólares provenientes de fondos norteamericanos, promete transformar la infraestructura del país, pero ha sido criticado por su impacto ambiental y la gestión de su estudio de impacto ambiental (EsIA).
Podría leer: MiAmbiente busca crear nuevos corredores biológicos con proyecto rural y ambiental en Azuero
El proyecto
Puerto Barú busca convertirse en el primer puerto verde de Panamá, cumpliendo con estándares internacionales de sostenibilidad. La visión del proyecto es integrarse en la región de manera que minimice el impacto ambiental mientras impulsa el desarrollo económico. Según Ismael González, gerente del proyecto, “han cumplido con estándares internacionales y han trabajado con la comunidad, la Universidad de Panamá y la Universidad Tecnológica de Panamá para abordar problemas ambientales, como el manejo del agua.”
Controversia ambiental
El EsIA del proyecto, clasificado como categoría III, fue aprobado en enero durante la administración del exministro de Ambiente, Milciades Concepción. Este estudio ha sido objeto de críticas por no reflejar adecuadamente el impacto ambiental potencial del puerto, particularmente sobre los manglares de David, protegidos desde 2007 tras un decreto alcadicio. Los manglares protegidos abarcan David, Pedregal y Las Lomas.
Guido Berguido, biólogo y director ejecutivo de la Asociación Adopta Bosque Panamá, manifestó a TVN-2.com las preocupaciones de las organizaciones ambientales sobre este proyecto.
“Seis organizaciones han presentado una demanda de nulidad ante la Corte Suprema de Justicia contra la resolución que aprobó el estudio de impacto ambiental del proyecto Puerto Barú. El estudio no refleja la magnitud del impacto que tendría el proyecto, que implica la devastación de hectáreas de manglares en el cauce de navegación", indicó.
Berguido y otros ambientalistas argumentan que el proyecto afectará gravemente el ecosistema de los manglares, un hábitat crucial para la biodiversidad local y un elemento importante en la protección contra fenómenos climáticos extremos. Aunque el puerto en sí no está dentro del área protegida, el canal de navegación de 31 kilómetros atraviesa esta zona, lo que requerirá dragado y podría comprometer la salud del estuario.
"Lo que no indican es que el canal de navegación que son 31 km atraviesa en efecto el área protegida de los manglares de David, entonces también tienen que dragar, porque es un estuario que en algunas partes tiene 4 metros de profundidad, y tendrían que cavar más del triple de la profundidad para que tenga un calado aceptable para los navíos que van a estar utilizando el proyecto", explicó el biólogo.
Además, Berguido criticó la fase de consulta pública del proyecto, que considera insuficiente y limitada. “La consulta pública fue muy restringida, lo que impidió una participación amplia y efectiva de la comunidad.”
La posición del Puerto Barú
Desde la perspectiva de González, el proyecto ha tomado medidas extensivas para garantizar la sostenibilidad y afirmó que en efecto, el proyecto no ingresa al área protegida, pero sí colinda con los manglares.
“Hemos cumplido con estándares internacionales, porque la visión que se tiene que es un punto muy importante, es que sea el primer puerto verde de Panamá. Desde la visión de concepción del proyecto, se consideran estándares internacionales de sostenibilidad y poco cambio con el ambiente”, aseguró.
González defendió los estudios técnicos y ambientales del proyecto, los cuales tardaron años.
“Si nosotros con una inversión de 250 millones de dólares de fondos americanos, con esos estándares, pensamos que vamos a crear un golpe al ambiente, no estaríamos aquí. Estamos convencidos con los estudios que hemos hecho”, precisó.
Además, afirma que la principal amenaza a los ecosistemas no proviene del puerto, sino de la gestión inadecuada de los manglares.
"La principal amenaza de este ecosistema, no es el puerto, el problema es que se convierta en un manglar como el de Panamá Viejo, que es basurero con manglar, porque eso es un símbolo del fracaso social”, criticó.
González también resalta que la consulta pública fue extensa, con la participación de más de 800 personas, y que se respondieron 120 preguntas de las organizaciones críticas, las cuales requirieron estudios adicionales que fueron entregados formalmente al Ministerio de Ambiente.
Las organizaciones esperan que el ministro de Ambiente, Juan Carlos Navarro, valore los argumentos que se presentaron y esté de acuerdo con la demanda de nulidad que fue presentada.
En esta demanda no solo se está solicitando que se declare nulo el estudio de impacto ambiental, sino que se solicita una suspensión provisional para cualquier movimiento.
TVN-2.com intentó conocer la posición del Ministerio de Ambiente frente a esta demanda, sin embargo, al cierre de esta nota no recibimos respuesta.