Precios de la cebolla afectan el condimento

Ciudad de Panamá, Panamá/Poca sazón. En las tierras altas de la provincia de Chiriquí la libra de cebolla se consigue actualmente en 55 centavos la libra, cifra que según los cebolleros  casi roza con los costos de producción, mientras que para el consumidor la libra del bulbo alcanza los 1.50 dólares.

Esta situación no es controlada por los agricultores, pues la cadena de comercialización es la responsable del precio final del bulbo, aclaró Augusto Jiménez, de la Asociación de la Comunidad Productora de Tierras Altas (Acpta), quien enfatizó que “escapamos de los precios que impactan o no al consumidor”.

Para Jiménez, la importación del bulbo para abaratar el precio es “una leyenda urbana”, toda vez que desde que se implementó la Ley 49 de junio de 2017, que establece la organización y funcionamiento de las cadenas agroalimentarias, “los importadores están invitados” solo en el evento de que la producción nacional no cubra el consumo.

Hoy día el consumo de cebolla en Panamá se estima en 600,000 quintales anuales, que divididos representan 50,000 quintales por mes.

El dirigente agrícola dijo que para que los importadores no tengan excusas para traer la cebolla tarde, alegando que las cuotas se les otorgan con retraso, ya se les aprobó 20,000 quintales para octubre, 30,000 para noviembre y 25,000 quintales para diciembre.

Si estos señores no cumplen en diciembre, agregó Jiménez, la ley señala las sanciones y una de ellas es deshabilitarlos como importadores. “Lo estamos diciendo ahora y vamos a hacer pública nuestra advertencia”, puntualizó.

Mientras los precios del bulbo se cocinan hacia el alza, la ama de casa Lourdes Barrios comentó que, “ya no hago tanto refrito, pues la cebolla está muy cara”, por lo que indicó que llegó el momento de buscar alternativas para tener una buena sazón.

“El panameño está bajando su consumo de cebolla, porque a esos precios le sale mejor comprarse una libra de pollo”, aportó Rodolfo Adames, de la Asociación Nacional de Comerciantes y Distribuidores de Víveres de Panamá (Acovipa).

Adames sostuvo que el bulbo, sea importado o nacional, definitivamente se venderá en su totalidad, sobre todo cuando viene la temporada de mayor consumo.

En estos momentos, en los campos chiricanos “el tiempo está espectacularmente propicio para la producción nacional. Tenemos buenas cosechas para los meses de noviembre, diciembre, enero, febrero y marzo, tanto que nos preocupa qué vamos a hacer con los excedentes en los meses de febrero y marzo”, dijo Jiménez.

Al respecto, una fuente del Ministerio de Desarrollo Agropecuario, que solicitó la reserva de su nombre, adujo que "el problema es que los cebolleros siembran más de la cuenta, no planifican y piensan que todo lo que producen se lo van a comprar al precio que ellos quieren, en finca o en el Merca".

En cuanto a la importación, manifestó que un importador que pague sus impuestos puede vender la cebolla donde quiera, pues son las reglas del mercado, “aunque lo cierto es que el consumidor nunca se ve beneficiado si el bulbo abunda o no”.

Hace un mes la falta de cebolla en el mercado nacional era evidente, pero luego abundó el abastecimiento, ante la queja de los productores nacionales que aseguraban que el bulbo era importado, por lo que en las bodegas se les estaban quedando unos 10,000 quintales.

"El mercado de la cebolla se ha estancado por completo. La agrocadena debe ahora enderezar el norte, pues la prioridad debe ser la producción nacional, no la de afuera", se quejaba en su momento Lorenzo Jiménez, también dirigente de tierras altas.

La cebolla importada fue aprobada por la cadena agroalimentaria de papa y cebolla, que contó con el apoyo de los productores agrupados en la citada asociación.

En la última reunión de la agrocadena se debió analizar cómo se iba a vender la cebolla nacional que en ese momento estaba en la cadena de frío, agregó el dirigente, quien manifestaba que al momento de asignar las cuotas de importación se debe tener en cuenta solo a los que compran cebolla nacional.

La Asociación de la Comunidad Productora de Tierras Altas, detalló una fuente del sector, fue la aliada más visible de las autoridades agropecuarias para lograr la aprobación de la ley de la Política Agroalimentaria de Estado (PADE), que según sus proponentes "busca blindar el agro durante los próximos 25 años", privilegiando la producción nacional mediante trabas a las importaciones.

Con la cebolla aún caliente, esta semana un anuncio en las redes sociales ofertaba el saco de cebolla amarilla y morada a 24.39 dólares por contenedor de 40 pies “que demora de 20 a 25 días en llegar a Panamá”, lo que alarmó a los cebolleros locales, quienes pidieron explicaciones a la Autoridad Nacional de Aduanas y al Ministerio de Desarrollo Agropecuario, sin que hasta el momento se conozcan mayores detalles.