Mitos, realidades y vacíos históricos de la Independencia de Panamá de España
Historia de Panamá
Ciudad de Panamá/La historia (completa) de Panamá aún espera ser contada. Y efemérides significativas, como los 200 años de la independencia de Panamá, son momentos oportunos para dirigir el foco hacia episodios que, desde la óptica histórica, se han abordado de forma superficial o que, prácticamente, no se han estudiado.
Mucho más si la narrativa histórica empleada para contar el devenir del país no ha sido continua, dando saltos y saltos, muchas veces abruptos, desde tiempos de la colonización, en un intento por borrar de las páginas parte de los contextos que rodearon las diferentes etapas históricas, plantearon historiadores e investigadores sociales esta semana durante el conversatorio "Mitos y realidades de la Independencia de Panamá de España".
La catedrática e historiadora Agatha Williams, el sociólogo, docente universitario e investigador social Alonso Ramos; el profesor de antropología e historia Francisco Herrera y el profesor de ciencias políticas Richard Morales, analizaron la visión desde el prisma europeo que prima en el relato histórico nacional, los grupos y condiciones "invisibilizadas" en los libros de historia y la falta de reconocimiento de la identidad de nuestros pueblos, entre otros puntos, durante el reciente evento organizado por la Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero.
Eurocentrismo
Uno de los primeros conceptos tocados durante la presentación fue el eurocentrismo, término definido como la "tendencia a considerar los valores culturales, sociales y políticos de tradición europea como modelos universales". Europa en el centro de todo. Y fue esa idea la que propició una de las principales barreras para no reconocer la identidad panameña, al igual que en otros países del continente.
Desde la perspectiva eurocentrista, al contar la historia, no se suele hablar de las luchas de los pueblos, del ímpetu de la gente del campo y no se reivindica la figura de líderes que terminaron en el anonimato. Impera, desde tiempos de la ocupación europea, un relato enfocado desde el poder de los países colonizadores.
Identidad e invisibilidad
Aunque se han registrado pequeñas rupturas, Panamá, y el resto de América, sigue amarrada a una tradición de narrar la historia obviando la participación de los pueblos, la concepción cotidiana, el trabajo de los obreros, de los campesinos y el quehacer de las mujeres o de los grupos indígenas. Todo ello está "invisibilizado" en los relatos de los sucesos más relevantes de la historia, remarcaron.
Cuando pensamos en el avistamiento del mar del sur, lo situamos en la Ave. Balboa, cuando el suceso se registró en Darién; Darién fue "invisibilizado", ilustraron. Y así se ha propiciado el problema de la identidad y pertenencia, que no es solo de Panamá. "En América tenemos algo de español, sí, pero mucho de indígena y eso ha sido invisibilizado, América no resalta en su historia a sus grandes civilizaciones, cuando deberíamos estar orgullosos de los mayas quiché, de la cultura monagrillo de Panamá, de la resistencia indígena; al contrario se exalta la historia del gran poder hegemónico, hablamos de la 'madre patria'... eso nos ha impedido vernos desde adentro, con nuestros propios aportes científicos, culturales y sociales; América tiene que revisar su integridad (...) No resaltamos, por ejemplo, lo que dicen los geólogos del surgimiento del istmo panameño, el suceso más importante en siglos, al unir a América, separar los océanos y cambiar el clima global ¿Cuándo se enseña eso en la historia para sentirse identificado con esta territorialidad?", planteó la doctora Williams.
Vacíos históricos
Panamá fue uno de los últimos países en unirse a la ola de las revoluciones latinoamericanas y cuando lo hizo fue producto de un hecho determinante: el movimiento que surge en La Villa de Los Santos, liderado por campesinos, el cual obligó a las élites de la capital a dar el paso independentista en 1821. El famoso primer grito de independencia del 10 de noviembre que, no obstante, carece de un análisis profundo colectivo.
¿Cómo esos campesinos llegaron a tener la fuerza que tuvieron en ese momento para dar pie a una independencia? Para responder esta interrogante clave, se puede recurrir a una investigación del historiador Omar Jaén Suárez que ayudó a llenar ese vacío histórico, al explicar que para entender lo que sucedió en La Villa, debemos retroceder hasta 1739, cuando terminan las ferias de Portobelo y empieza un supuesto periodo de decadencia comercial del país hasta 1840, pero es justo en ese periodo en el que nace el "mundo rural" de Panamá, pues la población de Coclé y Veraguas crece vertiginosamente, los comerciantes se convierten en terratenientes, y esa parte del país se posiciona a tal punto que para 1800, en la ciudad de Panamá fueron censadas unas 4,000 personas, la cifra más baja hasta entonces, porque la mayoría de los habitantes vivía en lo que hoy conocemos como el interior del país. Todo ayudó a generar las condiciones para impulsar el movimiento independentista.
Saltos o cortes de contextos históricos relevantes de este tipo, son constantes en el devenir de Panamá. No se habla ni se analiza, por ejemplo, los movimientos separatistas, como el tempranero de 1830 o el de 1840, ilustraron los especialistas. "Es un reto crucial que iniciemos un proceso de discusión y replantearnos la historia no solo en términos de cómo la hemos conocido, sino en un sentido formativo", apuntaron y destacaron un ejemplo más reciente: Victoriano Lorenzo, figura relevante que no aparece en los libros hasta los años 70 del siglo pasado, siendo visto antes solo como un delincuente de los caminos.
Si vemos qué se está enseñando en las escuelas y universidades y que se está transmitiendo a través de los medios de comunicación, notaremos que solo se enfatiza una parte de esa realidad histórica y eso no nos permite comprender qué sucedió hace 200 años, y qué pasa ahora en en el país, comentaron los panelistas. El reto, prosiguieron, es romper con esa visión parcial de los hechos para "tratar de pensar dentro de la totalidad" de los acontecimientos.
"Los maestros tenemos un gran compromisos en crear ese pensamiento crítico, de hacer la ruptura con las metodologías tradicionales de la historia cronológica, rígida, estática, que no toma en cuenta la dinámica humana, la historia de los pueblos, sus vivencias y logros, y así abrir las mentes a ese deseo de aprender".
Blog del bicentenario
En aras de ayudar a contextualizar la historia de Panamá desde su independencia de España, la Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero ha puesto en línea un blog o sección especial con cientos de documentos digitalizados de libros, revistas, boletines, periódicos, monografías, etc., vinculados con el acontecimiento histórico.
El espacio, disponible para consulta en la cabecera de la página de la biblioteca (www.binal.ac.pa), es el resultado de un año de preparación de los documentos resguardados por la institución, destacó Mario García Hudson, coordinador del Centro Audiviovisual de la Biblioteca Nacional.