Hojas fósiles, una 'ventana' a los bosques tropicales previo a la última gran extinción
La científica Mónica Carvalho comparte cómo, por medio del análisis de las marcas que dejan las hojas en las rocas, han podido reconstruir parte del pasado de los bosques tropicales, antes del evento de extinción que acabó con los dinosaurios.
Ciudad de Panamá, Panamá/Una hoja de árbol es capaz de proporcionar mucha información de su entorno: condiciones climáticas como lluvia o temperatura, si recibía mucho sol o sombra, el tipo de bosque del que proviene, estado del árbol, sus insectos... Por tanto, la hojarasca característica de las zonas boscosas, es un fiel reflejo de su ecología, afirma la paleobotánica Mónica Carvalho, quien lleva años investigando las condiciones ambientales detrás de la evolución de los bosques del trópico.
Carvalho trabaja específicamente con hojas fósiles, aquellos "dibujos" perfectamente estampados en roca hace millones de años. "Mi investigación consiste en interpretar estos fósiles para saber cuál es la historia de los bosques tropicales y cuánto ha cambiado su ecología", puntualizó la investigadora en la reciente presentación "Lo que nos cuentan las hojas, historias de extinción y los orígenes de los bosques tropicales".
La científica empezó explicando lo compleja que puede llegar a ser la estructura de una hoja común, como la de mango, con unos 100 metros de "venas" de diferentes tamaños en cada una de ellas. Por eso, cuando encuentran una hoja "fotografiada" en una roca muy antigua, se convierte en una suerte de "ventana" al pasado.
Y tras trabajar con más de 6,000 hojas fósiles y muestras de polen fósil recolectadas de antes y después de la extinción de los dinosaurios, Carvalho ha logrado esbozar cómo era el bosque tropical antes del impacto del asteroide de 11 kilómetros de diámetro, Chicxulub, que se estrelló en lo que hoy es la península de Yucatán, en México hace 66 millones de años.
Ciertamente, los bosques eran muy diferentes a los que quedaron tras el evento de extinción. Cambiaron en tamaño, forma, fisiología, estructura y composición (familias, géneros, etc.), detalló la paleobotánica del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (Stri).
Antes, prosiguió la científica, los bosques del trópico eran más abiertos, quizá por la presencia de la megafauna que se abría camino entre la vegetación, y había poca diferencia en la química de las hojas de arriba, en el dosel del bosque, y las de niveles más bajos.
Hoy, en cambio, los bosques de América y el resto de la zona tropical, son muy cerrados desde el dosel, provocando que muy poca luz llegue al suelo y ello hace que la química de las hojas del dosel sea muy distinta a las de abajo.
En cuanto a las especies de plantas dominantes antes de la extinción, los helechos, plantas con flores y muchas coníferas, como pinos, eran las que predominaban. En líneas más generales, los datos obtenidos de las hojas fósiles, mostraron que hace 66 millones de años, en los trópicos desapareció el 45% de la diversidad de plantas debido al impacto del asteroide y ese daño tardó 7 millones de años en recuperarse.
Hoy día está registrándose una situación algo similar debido a la deforestación, destacó Carvalho, ya que para 2050, por ejemplo, el 50% del Amazonas estará en niveles de amenaza de extinción. Y comparó: "Los humanos estamos reduciendo el hábitat de los bosques a una velocidad tal, que el efecto puede ser comparado con el choque de aquel asteroide gigante hace 66 millones de años".