Hiroshima: La bomba que cambió el mundo
Segunda guerra mundial
Hace 77 años Estados Unidos lanzó contra la población de Hiroshima en Japón, la primera bomba atómica en la historia de las armas de destrucción masiva.
A las 8:15 de la mañana del martes 6 de agosto de 1945, hace 77 años, el mundo cambió violentamente tras el lanzamiento sobre la población civil de Hiroshima, en Japón de la primera bomba nuclear por parte de Estados Unidos. La detonación mató al instante a cerca de 70 mil personas y otras 69 mil resultaron heridas.
Ante la negativa de rendición de los japoneses, tres días después, el 9 de agosto, la ciudad de Nagasaki recibió una segunda embestida nuclear que acabó instantáneamente con la vida de 80 mil personas.
¿Por qué pasó?
En 1945 Estados Unidos y Japón llevaban años enfrentados en lo que se conoce como la Guerra del Pacífico, uno de los mayores escenarios bélicos de la Segunda Guerra Mundial. Y que amenazaba con extender el conflicto mucho más allá de la rendición de la Alemania nazi, lo que preocupaba a los aliados.
Por lo que, el 26 de julio de ese año el presidente estadounidense Harry S. Truman dirige un ultimátum contra los japoneses en el que les exigía una “rendición incondicional” de lo contrario, les esperaba “una destrucción rápida y absoluta”.
Su seguridad se basaba en que días antes, el 16 de julio, Estados Unidos había detonado con éxito la bomba Trinity, la primera arma nuclear que se ensayaba en el mundo como resultado del Proyecto Manhattan que buscaba colocar a ese país a la vanguardia de las armas de destrucción masivas.
Tras el bombardeo de estas dos ciudades se forzó la rendición de Japón que se hace efectiva el 15 de agosto de 1945, cuando el emperador Hiroito emite un mensaje radial en el que acepta la rendición incondicional.
Dos semanas después, el 2 de septiembre de 1945, finaliza oficialmente la Segunda Guerra Mundial.
Estados Unidos sigue siendo el único país que ha utilizado bombas nucleares en una guerra.
Los bombardeos
Little Boy fue el nombre dado a la primera bomba lanzada sobre Hiroshima por el bombardero B-29 Enola Gay piloteado por el coronel Paul Tibbets. En la nave iban también el coronel Thomas W. Ferebee, experto en bombardeos, el capitán Theodore J. van Kink, copiloto, y el capitán Robert Lewis, oficial de tripulación.
Esta primera bomba, era un arma sencilla que utilizaba uranio-235, con un peso de 4,400 kilogramos y una potencia explosiva de 16 kilotones (1600 toneladas de dinamita). Se detonó una altitud de 600 metros sobre la ciudad japonesa.
Fat Man fue el apodo dado a la segunda bomba lanzada —en este caso de plutonio— por el ejército estadounidense sobre Nagasaki, el 9 de agosto de 1945. Detonada a una altitud de 550 metros sobre la ciudad, el dispositivo de 3,25 metros de longitud por 1,52 de diámetro, pesaba 4,630 kilogramos y tenía una potencia de 25 kilotones.
De acuerdo con los registros, el lanzamiento sobre el segundo blanco estaba programado para el 11 de agosto, pero debido al mal tiempo se adelantó para el 9 de agosto. Charles W. Sweeny despegó de la isla de Tinian en otro B-29, el Bock’s Car, a las 2:56 horas rumbo a Kokura.
Sin embargo, durante el vuelo, el mecánico a bordo, John Kuharek, informó que no funcionaba una de las bombas de gasolina y no alcanzarían a llegar al blanco.
Sweeney le avisó al jefe de la misión, Tibbets, quien dejó la decisión en manos del piloto.
Entonces, Fat Man se activó en pleno vuelo. Nervioso, Sweeney decidió abortar la misión y avisó por radio: esto puso a los japoneses sobre aviso. A las 11:02 horas se encontraron sobre el tercer blanco de la lista que estaba más cerca que el segundo, así que lanzaron la bomba que cayó sobre Nagasaki, explotando con una energía de aproximadamente 20 kilotones de TNT.
Los ataques provocaron la rendición incondicional del Japón.
Hasta la fecha, estos bombardeos constituyen los únicos ataques nucleares de la historia. En total se cree que las víctimas ascienden a unos 246 mil muertos.
Críticas y repercusiones
En 1958, el Ayuntamiento de Hiroshimaaprobó una resolución de condena a Truman por negarse a expresar remordimiento por usar las bombas atómicas y por seguir promoviendo su uso en una situación de emergencia.
En la resolución los residentes de la ciudad reiteraron que, "consideran su deber sublime ser la piedra angular de la paz mundial y ninguna nación del mundo nunca debería permitirse repetir el error de utilizar las armas nucleares".
Además, en el docimento destacan que la postura del expresidente es una "deshonra grave cometida contra el pueblo de Hiroshima y sus víctimas caídas".
Ante esto, Truman respondió en una carta al presidente del Consejo, afirmando que "el sentimiento de la gente de su ciudad es fácil de entender, y yo no estoy de ninguna manera ofendido por la resolución".
Sin embargo, Truman destacó la necesidad de la decisión haciendo referencia a cómo EEUU había sido "apuñalado por la espalda" en el ataque a Pearl Harbor que llevó a cabo Japón y dijo que la decisión de utilizar las dos bombas nucleares salvó la vida de 250.000 soldados aliados y 250.000 japoneses ayudando a prevenir una invasión.