La 'difícil' reunión entre molineros y productores de arroz, ¿Qué beneficio se acordó para el consumidor?

Ciudad de Panamá/Fueron cuatro horas de una reunión calificada como “difícil, dura”. Los molineros insistían en que se les aprobara la importación de un millón y medio de quintales de arroz, mientras que los productores se oponían rotundamente, alegando que esa cantidad afectaría la producción nacional.

Ante la negativa de los productores, que prometía trancar cualquier acuerdo, un eufórico ministro de Desarrollo Agropecuario, Augusto Valderrama, con sus respectivos aporreos de mesa, los llamó a una reunión aparte en el salón El Maizal.

“Allí los encerró, les solicitó que aceptaran una importación, o de lo contrario esto traería una crisis. Luego todos salieron reídos, aceptando la importación de 600 mil quintales en cáscara”, informó una fuente presente en la reunión del lunes 6 de junio de la cadena agroalimentaria de arroz.

Compuesta por molineros, productores, consumidores, distribuidores de víveres y representantes de la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco), finalmente este mecanismo aprobó la importación.

“Los 600 mil quintales, distribuidos entre 25 molinos, no afecta en nada la producción nacional, cuya cosecha debe iniciar a principios de agosto”, señaló Omar Spiegel, presidente del Comité de Productores de Arroz de la provincia de Veraguas.

La posición inicial de los productores era la de no aceptar que se importara “ni un grano”, pero en apoyo al gobierno y a los consumidores se decidió aceptar, para que haya “un colchón” y se garantice la seguridad alimentaria ante cualquier situación que se produzca, señaló Omar Williams, vicepresidente de la Federación de Productores de Arroz y Granos Básicos de la República de Panamá.

La importación autorizada, dijo Williams, cubre unas tres semanas de consumo, que en nada afectará la producción nacional que estaría saliendo a principios de agosto.

El vicepresidente de la Federación de Productores de Arroz y Granos Básicos de la República de Panamá, manifestó que para evitar tensiones en el sector las autoridades agropecuarias deben hacer inventarios mensuales, que permitan conocer a ciencias ciertas cómo anda el desenvolvimiento de la producción y del consumo.

Este año se han hecho inventarios en enero, abril y junio, cuando hace 2 años se acordó que estos serían de manera regular.

Existe arroz suficiente en el país y el último inventario así lo demuestra, por ende esto garantiza que aquí no se tenía que hablar de desabastecimiento, afirmó Gabriel Araúz, presidente de la Nueva Asociación de Productores de Arroz de la provincia de Chiriquí.

Añadió que la jornada de ayer de la cadena agroalimentaria “fue larga, donde los molinos querían responsabilizarnos a nosotros de darse una situación anómala, por no aceptar la importación”.

Araúz explicó que para el 3 de septiembre ya se debía haber agotado el inventario de arroz que tenían los molinos, importado y nacional, pero que para esa fecha ya unas 7 mil hectáreas debían estar cosechadas, “o sea que teníamos un mes completo de colchón, que evitaría un desabastecimiento”.

Eso es lo que veníamos diciendo, sostuvo el productor, quien agregó que se opuso a la importación, y que en la cadena agroalimentaria no hubo consenso, “por lo que nos reunimos con el ministro Valderrama, quien solicitó un tiempo para analizar la situación y los productores llegamos a tratar de asegurar aún más con 600 mil quintales de arroz en cáscara cualquier situación extra que se pueda dar”.

Informó que esto se dio, a pesar de que esa importación en manos de los molinos le puede traer a los productores situaciones adversas en la comercialización, aunque los molineros se comprometieron a que no será así.

Sin embargo, el dirigente de los arroceros chiricanos señaló que por la experiencia que tienen con los molineros, cuando se llegan a acuerdos en la cadena agroalimentaria, prevén cualquier situación.

Ningún miembro de la Asociación Nacional de Molineros pudo ser ubicado para conocer la posición de este gremio respecto a la importación del grano, del que en ocasiones anteriores solicitaban traer 7 mil quintales.

Araúz dijo esperar que tanto el gobierno como los molineros sepan valorar el gesto de los productores para que el grano no falte en la mesa de los panameños, pues la seguridad alimentaria es una preocupación constante de los agricultores.

Por último, aclaró que los 600 mil quintales deben llegar al país antes del 1 de agosto, para que no se convierta en un arma de doble filo en contra de los productores, que en esa fecha ya deben estar en un nivel adelantado de cosecha.