Cerro Punta: una rica región productiva golpeada por el huracán Julia

Provincia de Chiriquí, Panamá/Totalmente aislada. Así podría quedar en cualquier momento Cerro Punta, en la provincia de Chiriquí, centro neurálgico de la producción de hortalizas en el país, debido a que se encuentra a merced de los fenómenos naturales, situación que preocupa a moradores y agricultores asociados en la Comunidad de Productores de Tierras Altas.

Los pasos existentes para llegar a Cerro Punta, la vía principal y los caminos de producción, están afectados desde noviembre del 2020 cuando el huracán Eta hizo estragos en esa región, y por si fuera poco este fin de semana los coletazos de Julia hicieron lo propio, dificultando el tránsito de los camiones articulados para recoger la producción “y hasta de los carros pequeños”, señaló Lorenzo Jiménez, de la citada comunidad de productores.

Un estudio reciente señala que Cerro Punta está sujeta a múltiples tipos de desastres naturales, toda vez que se encuentra en la superposición de zonas de riesgo de desastres naturales, más que cualquier otra región del país: inundaciones, deslizamientos de tierra, terremotos y potencial actividad volcánica son las amenazas en esta área.

Su proximidad al volcán Barú también la coloca en una zona sísmicamente activa, aunque la última actividad conocida del volcán fue en 1550, de acuerdo con el estudio Desastres Naturales en Cerro Punta: Historia e Impactos, de las autoras Olivia Lindsay y Naomi Weinberg.

Solo este domingo 9 de octubre la precipitación pluvial en esa región chiricana fue de 231.5 milímetros (mm), según un reporte local de la estación de Etesa, cuando la media anual es de 229.5 mm.

Hoy día, frente al gimnasio de Cerro Punta se ubica el centro poscosecha, donde los camiones articulados recogen la producción de hortalizas que es llevada hacia la ciudad capital y distintos puntos del país.

Después del huracán Eta se hicieron “pequeños arreglos” en las estructuras afectadas, sobre todo en un puente ubicado en uno de los puntos de acceso a la comunidad, pero el continuo transitar de los camiones continuó resintiéndolo, dijo la productora Ana Raquel Villarreal.

Igualmente, sostuvo que la deforestación en el área contribuye a los deslaves, que son cada vez más frecuentes cuando se presentan las lluvias.

Ubicada a unos 200 metros sobre el nivel del mar, en Cerro Punta la agricultura se ha desarrollado mayormente en las laderas, por lo que los suelos son propicios a la erosión.

Villarreal manifestó que los coletazos del huracán Julia no fueron tan fuertes como los de Eta.

Jiménez, por su parte, dijo que cultivos como la lechuga, brócoli, apio, zanahoria, papa y cebolla se han visto seriamente afectados por los coletazos del huracán Julia, no así la lechuga, que aguanta más agua.

Lo más preocupante es que para llegar a Cerro Punta no hay más vías, “no tenemos alternativas”, reiteró Jiménez.

Además de los daños en los caminos de producción, un morador del área informó que la vía principal se vio afectada, como a un kilómetro antes de llegar a donde se ubicaba la estación de Policía.

“No hemos podido llegar a nuestras fincas, pero en una evaluación primaria nos hemos percatado del grave daño que han sufrido los cultivos”, dijo en su momento el productor de hortalizas, José Estribí, quien señaló que en Cerro Punta, Bambito, Las Cumbres y Alto Guerra “la situación fue crítica”.

Las pérdidas se dan principalmente en la lechuga, apio y la cebolla, afirmó por su parte la productora Ana Martínez, del área de Volcán, quien agregó que “quizás la zanahoria sí aguante un poquito más”.

Las lluvias intermitentes que caen sobre esa provincia también podrían afectar al arroz que ya tiene de 60 a 80 días, indicó Gabriel Araúz, presidente de la nueva Asociación de Productores de Arroz de Chiriquí.

Wilford Lamastus, caficultor, manifestó que algunas plantaciones se vieron afectadas, sobre todo en el área de Paso Ancho, donde la creciente se llevó los puentes y los productores no pueden cruzar hacia las zonas de producción.

El también productor Hernán Cortés confirmó que los caminos de penetración están en malas condiciones, producto de los deslaves.

Los productores de las tierras altas de las provincia de Chiriquí coinciden en que no debe haber desabastecimiento de productos hortícolas, toda vez que antes de los coletazos del huracán Julia muchos habían sacado la producción hacia los centros de acopio.