Camiones con químicos y quema de llantas en protestas: ¿Qué dicen los expertos de la Universidad de Panamá?

Ciudad de Panamá/La quema de llantas expone a los manifestantes a padecer de enfermedades respiratorias y hasta cáncer, advirtieron expertos de la Universidad de Panamá. Los niños, los adultos mayores y las mujeres embarazadas son los más afectados.

Las dioxinas y furanos son compuestos altamente tóxicos y responsables de alteraciones endocrinas y cánceres. Las mascarillas solo protegen de las partículas grandes, más no de las microscópicas.

Las jornadas de protesta, acompañadas de quema de llantas, que desde hace tres semanas protagonizan grupos organizados del país amenazan la salud de los manifestantes, las personas que residen alrededor de los lugares en los cuales se realizan las protestas y al ambiente en general. Así lo dio a conocer un comunicado del Centro de Investigación e Información de Medicamentos y Tóxicos de la Universidad de Panamá.

Una información que respaldó el director nacional de Verificación del Desempeño Ambiental del Ministerio de Ambiente, Miguel Flores, quien además se refirió a situaciones como la permanencia de vehículos sobre la vía e incidentes como la del oxígeno hospitalario que se salió del contenedor que lo trasladaba.

Informe de la Universidad de Panamá

De acuerdo al comunicado de la Universidad de Panamá las llantas son uno de los objetos que más queman los manifestantes durante estas jornadas de protestas para cerrar las vías sin tener en cuenta que estas desprenden un humo tóxico “altamente nocivo” porque están hechas de caucho, un material que proviene del petróleo, es decir un hidrocarburo compuesto de diversas sustancias químicas orgánicas.

“La quema de llantas genera contaminantes extremadamente nocivos para la salud y gases que contribuyen al calentamiento global, contaminación visual, del aire y de las capas de aguas que se acumulan en los suelos”, refirió el documento.

Añadieron que el humo tiene partículas grandes que producen irritación en la piel, ojos, nariz, pero existen otras mucho más peligrosas como son las microscópicas que ingresan a los pulmones, se integran en el torrente sanguíneo y causan modificaciones genéticas, lo cual predispone enfermedades como el cáncer.

Además, advirtieron que las sustancias microscópicas son las que causan mayor daño, debido a que son de arsénico, níquel, zinc, cadmio, mercurio y cromo, los cuales se encuentran en el humo tóxico que desprenden las llantas quemadas.

“Las dioxinas y furanos son compuestos altamente tóxicos y responsables de alteraciones endocrinas y cánceres. Las mascarillas solo protegen de las partículas grandes, más no de las microscópicas”, informó la Universidad de Panamá en su comunicado.

También señalaron que estos gases pueden producir dos tipos de daños a la salud: Los agudos que se presentan durante la emisión de la humareda tóxica proveniente de la combustión de los materiales y los crónicos que se muestran síntomas después de meses, años y hasta décadas.

“Las personas con problemas coronarios, hipertensión arterial y los que sufrieron infartos pueden presentar mayores consecuencias, al igual que aquellos que sufren problemas respiratorios, niños, adultos mayores y mujeres embarazadas”, se puede leer en el documento.

Mi Ambiente 

El director nacional de Verificación del Desempeño Ambiental del Ministerio de Ambiente, Miguel Flores, expresó que el problema con la quema de llantas es que los manifestantes permanecen en sus alrededores y respiran el humo negro que estas emanan, al igual que las personas que viven alrededor de las áreas de protestas.

Flores explicó que la cercanía al lugar donde se queman las llantas afecta la salud, contamina el aire, el agua y manda un mal mensaje a la población más joven de este país, a la cual se le debe enseñar a proteger el ambiente.

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Añadió que los moradores de las comunidades cercanas, sobre todo los que tienen enfermedades hipertensivas, respiratorias o cardiacas, también están en riesgo porque respiran el carbón negro que emana de las llantas con toda la toxicidad que este contiene.

Sin embargo, Flores explicó que esta contaminación también se encuentra en la combustión del diesel de los camiones, la quema de la biomasa, mientras que tal como lo señaló el comunicado de la Universidad de Panamá expresó que existen partículas grandes y pequeñas las cuales pueden afectar a corto o largo plazo la salud y el ambiente. “El carbono negro [el que emana de las llantas] es más peligroso porque va directo a los alveolos pulmonares”, dijo.

Flores calificó como “una mala práctica” la quema de las llantas por la cantidad de contaminantes que por su propia fabricación contienen y por el riesgo a los que se exponen quienes respiran el humo negro que produce y la contaminación ambiental. 

Finalmente se refirió a situaciones como la del contenedor que se le desprendió el oxígeno hospitalario y a los vehículos que permanecen por largas horas en las vías porque también contribuyen con la contaminación ambiental. 

"Los carros cuando no están circulando, pero mantienen sus motores encendidos contaminan más el ambiente, porque no hacen la combustión completa, mientras las altas temperaturas pueden provocar incidentes mayores en los vehículos que trasladan combustibles peligrosos", terminó diciendo Flores.